Sánchez Arminio ordena a los árbitros que voten a Larrea en las elecciones de la RFEF
El candidato a la presidencia de la Federación Española de Fútbol Juan Luis Larrea irrumpió en la noche del jueves en una reunión del Comité Técnico de Árbitros (CTA) en San Sebastián. Todos los responsables territoriales del arbitraje español estaban celebrando una cena en el Hotel Amara Plaza de la capital donostiarra.
La cena, compuesta de una crema de calabacín y merluza al horno más postre y café, se desarrollaba con total normalidad hasta que el ex tesorero de la RFEF apareció como por ensalmo y se sentó junto a su amigo Victoriano en la mesa presidencial sin mediar saludo con nadie y ante la perplejidad de los presentes.
Larrea no estaba invitado y, dada su condición de candidato en el proceso electoral, muchos de los allí presentes consideraron esto una encerrona y una presión inaceptable su presencia. «Esto es un comportamiento irregular en mitad de las elecciones. ¡Se piensa que sigue como presidente!» comentó un asistente a la reunión. Los whatsapps volaban a todas partes de España. Uno de ellos decía: «Victoriano lo sabía. Tenía la silla guardada a su lado. ¡Qué decepción!».
Los árbitros recordaron como Larrea ya utilizó los avales que le consiguieron desde el CTA por petición de Sánchez Arminio, un escándalo que desveló El Confidencial hace dos meses, con el quiso asegurarse el apoyo de los árbitros. Con este precedente, la aparición del guipuzcoano en la cena reabre una herida en los colegiados que sienten que se les quiere manejar con fines electorales.
Larrea considera fundamental el apoyo de los árbitros y por eso en los últimos días ha intensificado sus acciones hacia este colectivo, con poco éxito, dado que según fuentes consultadas por este periódico, la mayoría de los colegiados han perdido el miedo y cada día se alejan más del tándem Larrea-Victoriano.
Y Victoriano quiere que vayan todos juntos el 17 de mayo
El candidato apareció en los postres y se sentó directamente en la mesa de Victoriano –con camisa rosa como se aprecia en la imagen– para conversar con él y recordarle que le deben su apoyo. Según el testimonio de algunos asistentes, la cena que transcurría de manera amigable y distendida pasó a tener un ambiente tenso e incómodo para todos. Hasta el punto de que Larrea se marchó en media hora sin decir ni adiós. Aunque eso no impidió que el jefe del CTA, que celebraba su reunión interterritorial, pidiera el voto para Larrea en una cena pagada por la RFEF.
Hay que recordar que el proceso electoral en la Federación de Fútbol no ha parado de sufrir demoras desde que Ángel María Villar fuese cesado de su cargo hace ya casi 10 meses meses. Las elecciones fueron puestas en jaque por el Consejo de Estado durante meses, hasta que a principios de este 2018 quedó resuelto este asunto. Posteriormente el TAD suspendió la fecha fijada del 9 de abril en una resolución inverosímil al no poder asistir un asambleísta a las mismas, cuando la lógica invitaba a presumir que se cambiaría la fecha de un partido de fútbol en lugar de la fecha de todo un proceso electoral.
Los comicios tendrán lugar el próximo 17 de mayo en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas. Ya no tiene lugar una nueva demora que o artimaña que deje al fútbol español en una interinidad infinita que es del todo inaceptable. El ex presidente de la AFE Luis Rubiales cuenta con el apoyo de la mayoría de federaciones territoriales, así como del fútbol modesto y los jugadores. Larrea, por su parte, intenta rascar votos porque con el apoyo de los clubes de la LFP no le da para conseguir retener el poder. Las prácticas empleadas por el ex tesorero de Villar son cuanto menos cuestionables.